Las nuevas leyes serán presentadas ante el Parlamento estatal hoy como parte de una iniciativa de 390 millones de dólares para hacer frente a la gestión de los criminales más violentos de esta jurisdicción que representen un riesgo inaceptable de reincidir en sus delitos tras cumplir sus condenas en prisión.
Los criminales más violentos del estado de Victoria podrán ser encarcelados hasta por una semana sin que pese una acusación en su contra si se considera de que están en riesgo de cometer un delito, de acuerdo a las órdenes de detención de emergencia.
Esto se aplicaría a pesar de que éstos no hayan violado las condiciones de sus órdenes de libertad.
Estos criminales serían encarcelados en un nuevo centro de seguridad en la localidad de Ararat, en donde se dará tratamiento e intervenciones a unos 20 delincuentes con orden de supervisión, una vez que se inaugure a finales de año.
Este plan, que se aplica ya en Victoria a los criminales de delitos sexuales graves, permite que los tribunales ordenen la detención continua del agresor o su supervisión mediante mecanismos de vigilancia electrónica o la imposición de toques de queda y zonas de exclusión.
Los delincuentes que tengan órdenes posteriores a sus condenas serán vigilados por la recientemente creada Autoridad Post-Condena, presidida por el exmagistrado y juez de instrucción Ian Gray.
Su creación fue parte de las recomendaciones de un estudio sobre la supervisión de criminales peligrosos tras el asesinato por apuñalamiento de la adolescente Masa Vukotic en 2015.
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