El médico español Lucas de Toca, quien trabaja en el Territorio del Norte, con remotas comunidades aborígenes, está advirtiendo, junto a otras autoridades de la comunidad, sobre un grave problema de salud pública que se está generando porque docenas de menores de edad están inhalando combustible de avión.
La cadena ABC mostró imágenes nocturnas de varios jóvenes que se suben al fuselaje de las avionetas, en la isla Elcho, para extraer el combustible, que luego inhalan.
Se calcula que unos 70 jóvenes han inhalado este combustible. Incluso niños de 7 años de edad se han unido a la peligrosa actividad. Unos 30 menores han tenido que ser hospitalizados.
Si bien, es común que muchos de estos menores inhalen gasolina u otras sustancias, como una cierta forma de adicción, en estos casos la situación es mucho más grave, porque el combustible AvGas contiene niveles peligrosos de plomo.
El médico Lucas de Toca conversó con Radio SBS sobre las consecuencias a corto y largo plazo que esta actividad puede generar en los menores de edad y sobre las acciones y las expectativas que la comunidad tiene para frenarla.
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