La vicepresidenta y primera dama Rosario Murillo intentó aliviar la tensión al anunciar en rueda de prensa la decisión de liberar a los detenidos en las protestas, a petición del arzobispo de Managua Leopoldo Brenes, "estableciendo las bases del diálogo".
Reveló también que una policía murió el domingo en las protestas. El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) dijo que actualizó el conteo de víctimas fatales a 27, sin incluir a la policía, con lo que el total de muertos subió a 28.
Entrevista con el periodista Nelson Rodríguez en Managua.