A menos de 24 horas de la elección a la controversial Asamblea Nacional Constituyente convocada por el Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el país vive un estado de tensión y zozobra.
Varios países han pronunciado su rechazo a esta elección, o al menos mostrado preocupación ante su inminente realización. Entre ellos se encuentra, Estados Unidos, Colombia, México, la Unión Europa, varios países integrantes de la OEA y el Mercosur.
El viernes Amnistía Internacional publicó un comunicado alertando que considera que la prohibición de protestas en Venezuela, impuesta por el gobierno de Nicolás Maduro días antes de la elección del domingo, "no hará más que empeorar una situación increíblemente volátil," dijo Erika Guevara-Rosas, Directora para las Américas de Amnistía Internacional.
“En vez de intentar silenciar el creciente descontento popular, las autoridades deben encontrar soluciones factibles a las razonables demandas de la gente. El continuar castigando a las voces disidentes no hará más que sumergir al país en una crisis aun más profunda,” señaló.