El Ministerio del Interior de Australia no procesa las solicitudes de ciudadanía australianas de manera oportuna, según un informe del auditor general del país oceánico.
Sin embargo, el Ministerio se ampara, para defenderse de las críticas, en el argumento de que las medidas introducidas en los últimos tres años para proteger la seguridad nacional y la seguridad de la comunidad están dando resultados.
Una revisión de la Oficina Nacional de Auditoría de Australia encontró que solo el 15 por ciento de las solicitudes de ciudadanía "por transferencia", que constituye la mayor parte de las solicitudes, se procesaron en un periodo de 80 días en el año fiscal 2017/18.
Esta cifra está muy por debajo del objetivo que se fijó el Ministerio que era procesar el 80% de las solicitudes en un plazo de 80 días, que se redujo en 2017.
No obstante, esta medición del Ministerio se basa en el tiempo necesario para obtener la ciudadanía desde la presentación de una solicitud hasta la ceremonia.
El auditor general expresó que el tiempo "aumentó significativamente" entre marzo de 2017 y septiembre de 2018, a pesar de una caída en la "complejidad relativa" de las solicitudes presentadas.
"El crecimiento en la demanda de ciudadanía en los últimos años fue impulsado por personas con buenos documentos de respaldo que llegaron a Australia con una visa de profesional cualificado", según la Oficina de Auditoría.
La critica del auditor apunta a que el personal encargado de gestionar estos trámites no era utilizado de manera eficiente.
"El Ministerio tiene una serie de iniciativas de capacitación que están diseñadas para mejorar la eficiencia pero que han sido lentas en su implementación", señala el documento.
El Ministerio del Interior de Australia objeta las críticas destacando que la proporción de solicitudes de ciudadanía rechazadas se ha duplicado del 3,4% en 2014/15 al 6,8% en los primeros meses de 2018/19, en virtud de las nuevas medidas de seguridad que han entrado en vigor en el país.
"Las medidas de integridad mejorada adoptadas por el Ministerio en los últimos tres años para proteger la seguridad nacional de Australia y la seguridad de la comunidad están dando resultados", alega el Ministerio.
"Siempre daremos prioridad a estos esfuerzos sobre la velocidad", agregó.
El Ministerio ha aceptado la recomendación del auditor general de revisar cómo financia sus actividades para la obtención de ciudadanía, basándose en los últimos niveles de actividad.
Pero el Ministerio ha rechazado una recomendación para reportar públicamente sus indicadores clave de desempeño, diciendo que podrían dar a las personas expectativas poco realistas.
La investigación se produjo después de que el Defensor del Pueblo de Australia, el Consejo de Refugiados de Australia y otros manifestaran su preocupación sobre la duración del proceso de solicitud de ciudadanía.