Numerosos inmigrantes han expresado alivio después de que el senador independiente Nick Xenophon reiteró que su partido no apoyaría el proyecto de ley de ciudadanía propuesto por el gobierno de Malcolm Turnbull.
"Estoy muy agradecida con todos los senadores que se han opuesto al proyecto de ley y me alegro de que él [Nick Xenophon] haya salido ahora y haya dicho que no lo apoyarán", dijo Shruti Vaidya, una inmigrante que ha estado haciendo campaña contra el proyecto de Ley.
En una entrevista con radio SBS, la Sra. Vaidya explicó que actualmente está trabajando para uno de los bancos más grandes en Sydney después de inmigrar a Australia como estudiante universitaria cuatro años atrás. El año pasado se le concedió la residencia permanente y ahora espera solicitar la ciudadanía australiana.
La Sra. Vaidya es una de las personas que hizo una presentación ante el comité del Senado en contra del proyecto de Ley que propone aumentar el tiempo de espera para los inmigrantes, como la Sra. Vaidya, a cuatro años (en lugar de un año) antes de poder solicitar la ciudadanía.
Ella junto a miles de inmigrantes de toda Australia han pedido a los políticos australianos que se opongan a los cambios propuestos para la Ley de ciudadanía que incluyen extender el tiempo de espera para solicitar la ciudadanía, obligar a los inmigrantes a demostrar un dominio del idioma inglés más alto y otorgar poderes adicionales al ministro de inmigración.
El Senado le ha dicho al gobierno australiano que debe resolver el tema mediante una votación el miércoles. Si el gobierno no presenta los cambios a la legislación, arriesga que su propuesta sea eliminada por defecto.
Si eso sucede, la legislación será eliminada del documento de notificación del Senado.
Para restaurarlo el gobierno tendrá que ganar una moción en una etapa posterior.
El Partido Laborista y los Verdes se oponen a los cambios y el senador independiente Nick Xenophon ha dicho que no apoyará el paquete de reformas en su formato actual.
El senador de los verdes, Nick McKim, dijo el martes a periodistas en Canberra que el gobierno estaba llevando al país a los tiempos de la antigua política blanca de Australia.
Pero el liberal demócrata David Leyonhjelm apoya ampliamente los cambios y quiere aumentar el período de espera a 10 años, como es el caso en Suiza.