Detrás de "Narcos": exagente de la DEA revela detalles de la operación que acabó con Pablo Escobar

El exagente de la DEA cuenta a SBS Spanish sobre su participación en la caída de uno de los narcotraficantes más importantes de América Latina.

Pablo Escobar, left, 41-year-old billionaire leader of the Medellin drug cartel, poses at a soccer game in Medellin, Colombia, in 1983.  At right is an unidentified bodyguard.  (AP Photo)

Pablo Escobar (sx) durante una partita di calcio a Medellin nel 1983. Source: AAP Image/AP Photo

Cuando Javier Peña llegó a Bogotá como agente de la Administración para el Control de Drogas (DEA) apenas contaba con cuatro años de experiencia en la organización. Sus trabajos incluían algunas operaciones menores contra narcotraficantes de bajo perfil que operaban en Estados Unidos, y algunas investigaciones de escritorio sobre los grandes capos de la droga. Peña aspiraba a ser enviado a México, pero sus jefes decidieron que serviría más en Colombia, así que le asignaron el caso de Pablo Escobar, del cual no sabía nada hasta ese momento.

Era finales de la década de los 80, uno de los períodos más sangrientos en Colombia. La expansión del negocio de la droga corroía todas las esferas de poder. Fue a esa Bogotá implacable a la que llegó Javier Peña para unirse al equipo de Steve Murphy para investigar al hombre que movía casi el 80 por ciento de la cocaína que circulaba en Estados Unidos.

Pablo Escobar era en ese entonces el rey de la droga. Era admirado y respetado por muchos, ya que había sido representado como una especie de "Robin Hood" que ayudaba a los más desposeídos. Pero sus sicarios, asesinos a sueldo, mataban a sangre fría indiscriminadamente.

“Yo no sabía qué era un sicario hasta ese momento. Sí, hay mucha gente que lo quería y que tal vez todavía lo quiere, pero para nosotros Pablo Escobar mató a mucha gente inocente," lamenta Peña.

"Llegaron a poner de cinco a diez carros bomba por día. Mucha gente inocente perdió la vida con estos carros-bomba, los ponían afuera de los centros comerciales, afuera de nuestra base cuando salíamos. Era algo que nosotros nunca habíamos visto”.
DEA Educational Foundation Gala
Javier Pena attends the DEA Educational Foundation Gala on December 6, 2018 in Los Angeles, California. (Photo by Earl Gibson III/Getty Images) Source: Earl Gibson III/Getty Images
Los alarmantes niveles de violencia que sufrió el pueblo colombiano durante la época de “gloria” de Escobar es algo que todavía enfurece a Peña.

El exagente de la DEA no sólo recuerda con horror la pérdida de vidas inocentes en la explosión del vuelo de Avianca en 1989 donde murieron 107 personas. Peña destaca el asesinato de policías, además de los incontables atentados contra cuidadanos comunes y dirigentes políticos.

Escobar llegó a pagar $100 dólares por la vida de un policía.

“La violencia en ese tiempo en Colombia era una cosa tenaz, era algo que nunca nadie había visto", recuerda.

“Sí, Pablo Escobar ayudó a mucha gente, pero él esperaba algo también. Militaba con los sicarios que estaban siempre listos para ir a matar para Pablo Escobar. Fue una persona que hizo mucha maldad. (...) Mató a muchos amigos míos que eran policías. Por eso yo nunca lo voy a perdonar”, declara contundente.
Los años de pesquisa estuvieron plagados de altos y bajos. Los tentáculos de Escobar llegaban hasta las cúpulas más altas de la política colombiana. En ese sentido, para Peña, uno de los obstáculos más grandes fue sortear el poder económico de Escobar, que le permitió negociar casi todo, incluso hasta su propio “encarcelamiento” en la famosa prisión La Catedral.

En 1991, Escobar decició "entregarse" a las autoridades, a cambio de no ser extraditado a Estados Unidos por los crímenes que se le imputaban. Una hora más tarde, la Asamblea Constituyente aprobó la no extradición de colombianos.

La Catedral, la prisión construtída por el propio Escobar, era conocida como la "Cárcel de Máxima Comodidad", ya que contaba con habitaciones lujosamente amobladas, canchas deportivas y hasta salas de billar.

“La primera vez cuando el Gobierno lo dejó entregarse, nosotros sabíamos que esto iba a ser un show. El iba a tener control de su cárcel", dice Peña.

Para el exagente de la DEA las condiciones de entrega eran tan ridiculas, que parecía un chiste de mal gusto. 

"Él iba a construir su cárcel, llevar a sus guardias y nadie lo podía visitar. La sentencia era de 5 años. Eso fue para mi lo peor”, recuerda Javier Peña, al tiempo que puntualiza, que esas condiciones implicaban que no habría justicia para las víctimas del narcotráfico.

Una segunda oportunidad

El escape de Pablo Escobar de La Catedral en julio de 1992 representó una nueva oportunidad para el equipo de la DEA.

El gobierno colombiano conformó el llamado Bloque de Búsqueda que tenía como misión la recaptura de Escobar.

Tras 17 meses de intensas labores de rastreo, Pablo Escobar fue finalmente acorralado y abatido a tiros en Medellín en diciembre de 1993.

Sobre su rol en este momento histórico, Peña comparte un detalle que fue omitido en "Narcos", la famosa serie de Netflix sobre la vida de Pablo Escobar.

“Yo no estuve ahí cuando le dieron de baja. Mi compañero Steve Murphy estuvo, pero yo no", confiesa.

"Ese día el embajador me mandó a Miami porque un informante quería hablar conmigo. Yo traté de pelearle al embajador diciéndole que estábamos cerca, que me dejara ahí porque ya lo teníamos a la vista, y el embajador ganó y me mandó a Miami. Yo llegó a Miami y el que me dice que acaban de matar a Pablo Escobar es el informante".

Javier Peña lamenta no haber estado presente en ese momento, pero celebra la muerte de Pablo Escobar como "un triunfo para Colombia" y una reinvindicación para las víctimas.

“Los héroes de todo esto es la Policía Nacional de Colombia, no nosotros. Eso sí quiero dejar claro, ellos fueron los que tomaron su país otra vez y la venganza por toda la gente inocente que mataron."

Peña siente orgullo de haber estado involucrado en el caso, ya que el éxtio de la operación resultó en el desmantelamento total del Cartel de Medellín.

A la caída de Pablo Escobar siguió el arresto de muchos de sus cómplices, personal operativo y sicarios, lo que contribuyó a disminuir los niveles de violencia y el número de asesinatos y secuestros que se vivían en Colombia.

El Chapo no escapará

Respecto a la reciente condena a cadena perpetua del líder del cártel de Sinaloa, Joaquín el Chapo Guzmán, otro de los narcotraficantes más buscados en la historia reciente, Peña asegura que la condena del Chapo “no va a parar el tráfico de droga en México".

"Todavía hay muchos grupos operando. Cae un traficante y hay otros listos para ocupar sus lugares. Lo del Chapo fue una sentencia propia, y puedo garantizar que de ahí no se va a escapar; y ahí donde está no va a tener lo lujos que tenía en otras cárceles, pero los traficantes siguen. Ellos quieren hacer dinero y van a tomar sus oportunidades para tratar de hacer todo el dinero que puedan. Donde hay consumo, hay droga”.  

En medio del auge sobre las historias de narcos y sus leyendas, el exagente de la DEA, quien ahora es consultor de la cadena Netflix sobre la historia de Pablo Escobar, se encuentra de gira por varias ciudades australianas al lado de su compañero Steve Murphy para hablar sobre la serie Narcos y su participación en el caso de la caída de Pablo Escobar.

En sus charlas, Peña y Murphy hablan sobre la realidad de Pablo Escobar, más allá de la versión hollywoodense de la serie, con el fin de ofrecer una mirada veraz sobre este personaje.


Share

7 min read

Published

Updated

By Claudianna Blanco, Silvia Rosas


Share this with family and friends


Follow SBS Spanish

Download our apps
SBS Audio
SBS On Demand

Listen to our podcasts
Independent news and stories connecting you to life in Australia and Spanish-speaking Australians.
Learn about Australia's past in the present through some of our most influential Hispanic migrants.
Get the latest with our exclusive in-language podcasts on your favourite podcast apps.

Watch on SBS
Spanish News

Spanish News

Watch in onDemand