Las facturas médicas analizadas por el programa Four Corners de la ABC revelan que los pacientes pagan miles de dólares de sus bolsillos por sus operaciones y a pesar de que muchos culpan a Medicare, el problema puede recaer en los médicos que hacen cobros administrativos.
Un análisis realizado por el programa Four Corners de la ABC de 700 facturas médicas revela que los pacientes pagan miles de dólares de sus bolsillos por sus operaciones y a pesar de que muchos culpan a Medicare, el problema puede recaer en los médicos que hacen cobros administrativos Uno de los problemas hallados es cuando el paciente necesita múltiples procedimientos, exámenes y consultas para una sola dolencia.
Las facturas se acumulan y muchos de los costes no son cubiertos por los seguros médicos porque éstos se dan fuera de los hospitales y no son cubiertos por estos fondos.
El dinero desembolsado por Madonna Buiter por su tratamiento contra el cáncer de pechos fue de 16,000 dólares como resultado de unas 40 pruebas y exámenes a los que se sometió. Para cubrirlos debió gastar el dinero que ahorró junto a su marido para el depósito de su vivienda.
A ella le recomendaron que se busque un cirujano más barato.
Buiter explicó que le fue difícil calcular los costes reales y se quejó de que su seguro privado no fue de mucha ayuda.
“Ir de cirujano en cirujano hasta finalmente conseguir una cita, ni siquiera me dijeron qué anestesista iba a ver, así que nunca vi los gastos”, comentó.
Four Corners detectó que a los pacientes se les cobró por hacer citas o por los gastos administrativos, lo que según las asociaciones médicas es algo ilegal.
Muchos cirujanos además reciben una mayor cantidad de dinero en sus reembolsos si firman un contrato con los seguros médicos mediante el cual se comprometen a no cobrar una tarifa adicional, así que los llamados cobros por reserva son una manera de evadir ese acuerdo.
El cobro por reservas más alta que detecó Four Corners fue de más de 6,000 dólares..
“Los cobros por reservas o los cobros más allá de los vinculados a la cirugía son ilegales y no deberían existir, no es ético cobrarlos”, acotó John Batten del Colegio Australasiano de Cirujanos.
La mayoría de los pacientes no quiso culpar a los cirujanos de estos gastos extraordinarios, pero los expertos en políticas sanitarias indicaron que se debería ver estos cobros con mayor atención.
Terry Barnes, quien fue consultor político de dos ministros de la Salud en Australia, comentó que las aseguradoras son los blancos más comunes porque son vistos generalmente como los “chicos malos”.
“Los proveedores médicos siempre son vistos como los irreprochables. Son santos vestidos de blanco”, comentó Barnes.
El director de salud del Instituto Grattan, Stephen Duckett, dijo que los cirujanos cobran facturas escandalosas.
“Los médicos pueden cobrar lo que quieren. Es casi imposible para las aseguradoras establecer una prima que cubra todo lo que cobran algunos doctores y estos costes pueden ser mucho más altos que la tarifa fijada”, acotó.
Uno de los problemas es que en la década de 1940 se aprobó una enmienda constitucional que prohíbe a los médicos conscriptos cobrar tarifas reguladas.
En el reportaje se recomienda dialogar con el médico de cabecera sobre los cobros que hace el especialista a los que son referidos.
También se enfatiza que un médico más caro no es necesariamente un médico bueno.
Si el especialista le pide un examen que no es reembolsado por Medicare, se pueden preguntar por las opciones o la importancia de éste.
Preguntar sobre los costes sin avergonzarse dado que algunos médicos pueden modificar sus tarifas de acuerdo a la necesidad de los pacientes.
No pague los costes de reservas, administrativas o de cuidado y envíe esas facturas a su aseguradora para que hable con su cirujano directamente.
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