El esperado encuentro entre presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el líder opositor venezolano, Juan Guaidó, se produjo este miércoles en la Casa Blanca, más de un año después de que el jefe parlamentario se proclamara presidente interino de Venezuela.
La reunión cargada de simbolismo inició a las 2pm hora local cuando el líder opositor fue recibido en la puerta de la Casa Blanca por Trump, escoltado por una guardia de honor que se cuadró.
Es un importante espaldarazo para el líder opositor, a quien Washington y más de medio centenar de gobiernos reconocen como mandatario interino de su país.
Guaidó se alojó en la residencia destinada a los líderes extranjeros situada frente a la Casa Blanca y donde ahora ondea la bandera venezolana.
"La visita es una oportunidad de reafirmar el compromiso de Estados Unidos con el pueblo de Venezuela y para discutir cómo trabajar con el presidente Guaidó para acelerar una transición democrática", dijo la Casa Blanca en un comunicado.
"El verdadero y legítimo presidente", Trump
Guaidó asistió en la noche del martes como invitado al discurso anual sobre el estado de la Unión en el Capitolio, durante el cual Trump lo presentó como "el verdadero y legítimo presidente" de Venezuela y prometió "aplastar" la tiranía del gobierno de Nicolás Maduro.
"Estados Unidos lidera una coalición diplomática de 59 naciones contra el dictador socialista de Venezuela, Nicolás Maduro", dijo Trump en su discurso sobre el Estado de la Unión, ante la atenta mirada de Guaidó, que seguía sus palabras desde la galería.
"Maduro es un gobernante ilegítimo, un tirano que brutaliza a su pueblo. Pero el dominio de la tiranía de Maduro será aplastado y roto", agregó entre aplausos, antes de presentar a Guaidó como "el verdadero y legítimo presidente” de Venezuela.
Trump describió a Guaidó como "un hombre muy valiente que carga consigo las esperanzas, los sueños y las aspiraciones de todos los venezolanos".

Venezuelan opposition leader Juan Guaido waves as President Trump delivers his State of the Union address (AP) Source: AP
"El socialismo destruye las naciones. Pero siempre recuerden: la libertad unifica el alma", concluyó el presidente estadounidense entre más aplausos y el agradecimiento de Guaidó, que destacó que era un "gran honor".
Guaidó recibió una ovación de pie tanto de los republicanos como de los demócratas, en un momento de fuertes divisiones políticas en Washington.
Guaidó saludó en Twitter el espaldarazo de Trump. "¡Estamos unidos, Presidente @realDonaldTrump!", aseguró.
Para Guaidó, la invitación es un espaldarazo que sella su gira internacional que partió hace dos semanas con una reunión con el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo, y que lo llevó a Davos, en Suiza, sede del Foro Económico Mundial, y a Francia, donde fue recibido por el presidente Emmanuel Macron.
Después visitó en Canadá al primer ministro Justin Trudeau y este fin de semana sostuvo un mitin con los venezolanos residentes en Miami.
"Vamos a seguir trabajando con nuestros socios en la región para confrontar a la dictadura ilegítima en Venezuela", dijo la Casa Blanca.
Esta serie de apoyos es importante cuando ha pasado más de un año desde que Guaidó se proclamó presidente interino invocando la Constitución, después de que Maduro asumiera un segundo mandato que es cuestionado por las irregularidades en las elecciones de 2018.
El sucesor de Hugo Chávez se mantiene en el poder pese a las sanciones de Estados Unidos, entre ellas un embargo de facto al crudo de Venezuela que es crucial para su economía, en aguda contracción desde 2013.
En su pulso contra Guaidó, Maduro ha contado con el apoyo vital de China y Rusia, que son sus principales acreedores.
Un alto funcionario del gobierno estadounidense expresó este miércoles "preocupación" por el rol de la petrolera rusa Rosneft como socio comercial de Venezuela.
"Estamos muy preocupados por el comportamiento de Rosneft en Venezuela", dijo el alto cargo a los periodistas con condición de anonimato. El canciller ruso Serguei Lavrov visitará Caracas esta semana.
"Un fracaso" de la política contra Maduro
El tratamiento a Guaidó durante la tradicional alocución presidencial ante el Congreso de Estados Unidos generó rechazó en Caracas.
El gobierno de Maduro denunció las "violentas amenazas" de Trump, después de que el mandatario estadounidense prometiera "aplastar" la tiranía en Venezuela.
El jefe de la minoría demócrata del Senado, Chuck Schumer, dijo que la política de Trump sobre Venezuela "fracasó".
"Si la política estuviera funcionando, Juan Guaidó no estaría en la tribuna, estaría en Venezuela, estaría sentado en el palacio presidencial", dijo el líder demócrata. "El régimen de Maduro es más poderoso hoy que cuando el presidente comenzó su política en contra", agregó.
En medio de la caótica situación de la economía venezolana caracterizada por una aguda contracción y una hiperinflación, 4,7 millones de personas han huido del país, según cifras de la ONU.