Un conductor indio de Uber acusado de violar a una pasajera de 20 años en Gold Coast, Queensland, recibió libertad bajo fianza.
Según el periódico The Courier Mail, el conductor, un ciudadano indio de 24 años que reside en la localidad de Coombabah y que no puede ser nombrado por razones legales, estaba en Australia con una visa de estudiante para estudiar hostelería cuando presuntamente violó a la mujer.
El incidente ocurrió el 23 de septiembre después de que el conductor recogió a la pasajera de un renombrado club nocturno en Surfers Paradise y la llevó a su casa. El hombre dijo ante la Corte Suprema de Brisbane que la víctima había "apoyado su cabeza en su hombro" después de llegar a su destino.
La policía alega que cuando el auto se detuvo frente a su residencia, el conductor la besó y luego le mordió el labio. La presunta víctima le dijo a la policía que "simplemente se congeló y sintió que no podía detenerlo".
La mujer explicó a la policía que tenía miedo de que el conductor no la dejara salir de su sedán Honda y decidió darle su número de teléfono para calmarlo. Ella dijo que el conductor llamó al número de inmediato para verificar si era el número correcto.
Luego, el conductor supuestamente guardó el número de la mujer en los contactos de su teléfono móvil usando su propio nombre seguido por la palabra "amor".
La policía fue contactada por un guardia de seguridad que encontró a la presunta víctima sentada en el suelo y llorando, después de que el conductor se marchara.
El conductor supuestamente le envió a la mujer otros dos mensajes de texto poco después: "¿Cómo fue tu noche, espero que todo esté bien?" y "Estoy muy feliz de poder verte de nuevo si es posible, ¡espero que no me olvides! Envíame un mensaje de texto si me recuerdas, gracias. x (beso) "
Los resultados de los controles policiales con Uber coincidieron con los detalles del viaje proporcionados por el estudiante, dijo la policía al tribunal.
Las imágenes de una cámara CCTV obtenidas por la policía muestran como el auto de Uber se detiene cerca de la casa de la presunta víctima y permanece allí durante 27 minutos. Sin embargo, el conductor le dijo a la policía que no hubo ningún otro contacto con ella, excepto cuando presuntamente apoyó su cabeza en su hombro.
El abogado que representa el conductor de Uber, Scott Lynch, dijo al tribunal que la demandante estaba ebria y "ostensiblemente no puede recordar el viaje a casa".
El conductor dijo ante la corte que no volvería a trabajar para la empresa de transporte compartido, mientras estaba en libertad bajo fianza.
