Su proyecto de ley de refuerzo de la prueba de carácter volverá al parlamento en forma modificada hoy miércoles, después de que un intento anterior de consagrar las leyes fuera derrotado en el Senado a finales del año pasado.
Según el gobierno, las medidas crearían una prueba objetiva dirigida a los delincuentes condenados por delitos graves, como acoso, violencia doméstica, agresión a agentes de policía y abuso de menores, para que sean deportados por la vía rápida y se les deniegue el visado.
Después de haber utilizado sus poderes ministeriales para deportar a la estrella del tenis mundial, Novak Djokovic, el ministro de inmigración Alex Hawke ahora está presionando para obtener más.
La propuesta prevé la anulación de los visados de los no ciudadanos que hayan sido condenados por delitos violentos, pero con menos de 12 meses de cárcel.
La oposición se pregunta si los cambios son necesarios.
El senador laborista Murray Watt dice que no está claro qué poderes adicionales necesita el ministro de inmigración.
Ahora el Gobierno intenta aprobar estas leyes migratorias por tercera vez, tras proponerlas por primera vez en 2019.
Pero la experta en derecho migratorio Sanmati Verma dice que el proyecto de ley está mal redactado y será poco práctico de aplicar.
En Australia, la mayoría de las anulaciones de visados se realizan en virtud de la sección 501 de la Ley de Migración.
A través de estos poderes, el gobierno puede cancelar los visados de los no ciudadanos por cuestiones de carácter, así como por condenas penales, o si se considera que forman parte de un grupo sospechoso de cometer delitos.
Entrevistado: Miguel Mudbidri, agente migratorio en Sydney.
