Sin embargo, se han visto escenas violentas porta de una minoría y algunos han amenazado de muerte al premier Daniel Andrews y a otros servidores públicos.
Pero, Andrews está decidido a no dejar que lo que él denomina "una pequeña y fea turba" desbarate el proceso.
Además, el ex ministro laborista Adem Somyurek dice que votará en contra de las leyes poniendo más presión sobre el gobierno.
Las leyes sobre la pandemia del gobierno de Andrews están en peligro, ya que Somyurek ha declarado que votará en contra del proyecto de ley en su forma actual.
Somyurek, que se vio obligado a abandonar el partido debido a un escándalo de apilamiento de ramas, volverá hoy al parlamento tras una larga ausencia autoimpuesta para votar en contra de las leyes.
En un artículo publicado en el Herald Sun, Somyurek afirma que el proyecto de ley no contiene suficientes controles y equilibrios sobre los poderes otorgados al Primer Ministro.
El asegura que quiere hacer aportaciones a un nuevo proyecto de ley.
El gobierno va a contrarreloj para crear nuevas competencias, ya que de lo contrario podría no tener el marco legal para aplicar y crear normas para gestionar el COVID-19.
No puede prorrogar el estado de emergencia más allá del 15 de diciembre: a diferencia de otros estados, los poderes son finitos.
Los grupos jurídicos, las asociaciones empresariales, la oposición estatal y los manifestantes han expresado su preocupación por la propuesta de ley sobre la pandemia.
El debate sobre el proyecto de ley se reanudará hoy en la Cámara Alta, donde se esperaba que se aprobara por un estrecho margen con el apoyo de tres diputados del Partido de la Razón, Fiona Patten, del Partido de la Justicia Animal, Andy Meddick, y de los Verdes, Samantha Ratnam.
Sin embargo, la intervención de Somyurek significa que el proyecto de ley se enfrenta a una votación en punto muerto, hundiéndolo de hecho a menos que el gobierno pueda asegurar el apoyo de otro diputado.
Esto parece improbable si no se introducen más cambios en la legislación.
Esto se produce mientras los funcionarios de la lucha antiterrorista acusan a un hombre de Victoria que animó a los manifestantes contrarios al bloqueo a llevar armas de fuego al Parlamento del Estado y a sugerir que ejecutaran al primer ministro Daniel Andrews.
Continúan las investigaciones sobre otros presuntos extremistas implicados en las protestas contra la ley de pandemia.
Entrevistados: Peter Lochert, secretario del Departamento de Servicios Parlamentarios del Parlamento de Victoria; y Telmo Languiller, expresidente del parlamento de Victoria.
