Puntos destacados:
- El tesorero federal, Jim Chalmers, ha anunciado que el Gobierno federal no ofrecerá otra ronda de descuentos en las facturas de energía.
- Argumentó que los cambios en el sistema fiscal, así como en Medicare y en el Plan de Beneficios Farmacéuticos, proporcionarían un alivio más permanente.
- Muchos australianos están sintiendo los efectos del aumento de los precios de la electricidad, que está impulsando la inflación.
El tesorero federal, Jim Chalmers, ha anunciado que el Gobierno federal no ofrecerá otra ronda de descuentos en las facturas de energía.
En declaraciones realizadas en Canberra antes de la próxima actualización presupuestaria de mitad de año el lunes, Chalmers afirmó que el programa de descuentos no se prorrogará más allá de finales de este año.
"Esto supone un cambio en la forma en que estamos proporcionando ayuda para el coste de la vida", afirmó. "Se trata de un cambio con respecto a las medidas temporales, decididas inicialmente cuando la inflación era de casi el 8 por ciento, hacia una ayuda continua para el coste de la vida".
Argumentó que los cambios en el sistema fiscal, así como en Medicare y en el Plan de Beneficios Farmacéuticos, proporcionarían un alivio más permanente.
"La gente puede utilizarlo para ayudar a pagar sus facturas de electricidad o para hacer frente a otras presiones del coste de la vida", dijo sobre los recortes fiscales. "No ha sido una decisión fácil, pero es la decisión correcta".
"Hay más de una forma de proporcionar esta ayuda para el coste de la vida que la gente sigue necesitando en sus presupuestos familiares".
Todos los hogares y muchas pequeñas empresas recibieron $300 dólares en ayudas en el presupuesto de 2024, pagados trimestralmente. Antes de las elecciones se anunció una prórroga de $150 dólares para la segunda mitad de 2025.
Chalmers ha descartado ahora una cuarta ronda, afirmando que el Gobierno "ha sido sincero con la gente y ha dicho que estas ayudas nunca iban a ser una característica permanente del presupuesto".
El Partido Laborista aplicó recortes fiscales en julio de 2024, con nuevas reducciones previstas a partir del 1 de julio de 2026 y del 1 de julio de 2027. En marzo, el Gobierno afirmó que el efecto combinado de estos cambios supondría una reducción fiscal media de alrededor de $43 dólares a la semana en 2026-2027.
"La segunda ronda no está tan lejos", afirmó Chalmers.
Reacción de la oposición
En una declaración conjunta, el portavoz del Tesoro de la oposición, Ted O'Brien, y el portavoz de Finanzas, James Paterson, afirmaron: "La decisión del Partido Laborista de poner fin a la desgravación de las facturas energéticas de los hogares pone de manifiesto los desastres del Gobierno de Albanese en materia de coste de la vida, política energética y presupuesto".
"El Gobierno de Albanese ya ha supervisado la caída más pronunciada del nivel de vida en el mundo desarrollado, y todo apunta a que el coste de la vida seguirá aumentando en el próximo año".
"La Coalición entiende que debemos abordar las causas fundamentales de la crisis de la factura energética del Partido Laborista".
"Por eso, la Coalición ofrece un plan energético alternativo que da prioridad a una energía asequible y fiable. Nuestros objetivos de reducción de emisiones nunca se lograrán a expensas de las familias australianas, y este principio guiará todas las decisiones que tomemos", decía la declaración conjunta de la Coalición en la oposición.
La Coalición reveló su política energética el mes pasado, después de que tanto los Nacionales como los Liberales eliminaran de sus programas electorales los compromisos de cero emisiones netas para 2025.
Los australianos sienten la presión del aumento de los precios de la energía
Muchos australianos están sintiendo los efectos del aumento de los precios de la electricidad, que está impulsando la inflación.
Los datos sobre inflación publicados el mes pasado mostraron que los precios de la electricidad habían subido un 37 por ciento en el último año, y la Oficina Australiana de Estadística señaló que el aumento se debía principalmente al agotamiento de los descuentos del gobierno estatal por parte de los hogares.
En julio, Energy Consumers Australia reveló en un informe que uno de cada cinco hogares australianos tiene dificultades para pagar sus facturas de energía, y que los inquilinos se ven afectados de manera desproporcionada.
David Stuart tiene un negocio de pintura en las playas del norte de Sídney. El mes pasado, le dijo a SBS News que gastaba $24.000 dólares al año en electricidad antes de invertir en energías renovables.
"Dimos el paso. Nos pasamos a la energía solar y conseguimos un préstamo bancario para hacerlo", dijo. "Ya hemos pagado ese préstamo bancario. Ahora nuestras facturas de electricidad son negativas".
¿Qué hacer con las costosas facturas de energía?
Sally Tindall, directora de análisis de datos del sitio web de comparación financiera Canstar, afirmó que millones de australianos están pagando de más por los servicios públicos simplemente porque no han comparado las ofertas de la competencia en mucho tiempo.
"Nuestra investigación muestra que cambiar de un plan de precio medio a uno de los más baratos del mercado podría suponer un ahorro de hasta $406 dólares al año para un hogar típico en algunas zonas, e incluso más para hogares más grandes", declaró a SBS News a principios de este año.
Los consumidores también pueden hablar con los proveedores de energía y preguntar qué ayudas hay disponibles para pagar las facturas. Legalmente, los minoristas deben informar si hay una oferta mejor disponible.
Ahora que los australianos se enfrentan a un verano caluroso, hay varias formas de mantenerse frescos y limitar los gastos de energía, como poner el lavavajillas y la lavadora durante las horas valle y utilizar el horno solo durante las horas más frescas del día.
El CSIRO recomienda ajustar la temperatura del aire acondicionado entre 24 °C y 25 °C, y señala que por cada grado que se baja la temperatura, los costes pueden aumentar un 10 por ciento.
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