PUNTOS DESTACADOS
- El gobierno revisará las leyes migratorias tras el ataque en Bondi, con foco en antisemitismo y discursos de odio
- El gobierno revisará las leyes migratorias tras el ataque en Bondi, con foco en antisemitismo y discursos de odio
- Académicos y exfuncionarios alertan sobre riesgos de discriminación y mayor congestión del sistema migratorio
El ataque terrorista ocurrido en Bondi Beach el domingo pasado, que dejó 15 personas muertas, ha provocado un giro en el discurso político sobre migración en Australia. En respuesta, el gobierno federal anunció una revisión de las leyes migratorias como parte de un paquete más amplio para combatir el antisemitismo y el extremismo violento.
El ministro de Asuntos Internos, Tony Burke, confirmó que se buscará facilitar la cancelación y el rechazo de visas, afirmando que quienes llegan a Australia con visas son “invitados” y que “las personas que vienen a odiar no son necesarias”. El primer ministro Anthony Albanese respaldó la medida y adelantó nuevos proyectos de ley contra los discursos de odio y los llamados “predicadores del odio”.
Desde la oposición, figuras como el diputado liberal Andrew Hastie han planteado la necesidad de enfocarse no solo en cuántos migrantes llegan, sino en quiénes llegan, proponiendo una adhesión explícita a los llamados “valores australianos”. Sin embargo, estos valores ya forman parte de una declaración obligatoria para migrantes y no incluyen referencias religiosas específicas.
Expertos en migración y criminología han expresado su preocupación por el posible impacto de estas reformas. Advierten que los controles ideológicos podrían derivar en una vigilancia desproporcionada hacia personas musulmanas o percibidas como tales, y que evaluar creencias políticas o religiosas es complejo, subjetivo y difícil de aplicar sin generar discriminación.
Además, exfuncionarios del Departamento de Inmigración alertan que nuevas pruebas, entrevistas o revisiones de redes sociales podrían saturar aún más un sistema ya colapsado, afectando a estudiantes internacionales, trabajadores temporales y a más de 400.000 personas que actualmente esperan resolución de sus visas.
Conversamos con el agente migratorio Miguel Mudbidri, que nos ayudará a entender qué está en juego y cómo estas decisiones pueden afectar a los inmigrantes.
Escucha la entrevista haciendo clic en el podcast al inicio de la página.















